Guerra desde Principio de las Generaciones

Este breve estudio tiene como fin despertar la inquietud en el creyente de profundizar en las Sagradas Escrituras para entender el origen del conflicto entre Israel y las naciones enemigas.

Dato interesante acerca de Kislev: Es el noveno mes contando desde Nisan. Es el mes más oscuro del año, con días más cortos y noches más largas. Se le conoce como el “Mes de los Sueños e interpretaciones” y el “Mes de Esperanza” ya que la raíz del nombre Kislev significa “confianza” y/o “esperanza”. Similarmente, de los diez (10) sueños que aparecen en la Torá, nueve (9) aparecen durante las cuatro semanas de Kislev, entre los que se destacan el sueño de Jacob y los de su hijo José. Este es el mes en dónde celebramos Januca (12/8 – 12/15). La fiesta tradicional de la dedicación del Templo nuevamente para el Eterno, en dónde también se cree que Yeshua pudo haber sido depositado (concebido) en el vientre de María (probablemente para el solsticio de invierno, el día más corto, frío y oscuro) en dónde la luz hace su llegada a la tierra y luego nace para la Fiesta de los Tabernáculos.

Resumen: Isaac (Itzjak) se casa con Rebeca (Rivka). Luego de veinte años sin hijos, sus plegarias son respondidas y Rebeca concibe. El embarazo es difícil, ya que “los niños se pelean dentro suyo”; Di-s le dice que tiene “dos naciones en su vientre”, y que su hijo menor prevalecerá por sobre el mayor.

Esaú (Eisav) sale primero. Jacob (Iaacov) nace tomando el talón de Esaú. Esaú crece para ser un “cazador, un hombre del campo” (igual que Nimrod); Jacob es un “hombre completo”, un habitante de las tiendas del estudio. Isaac prefiere a Esaú, Rebeca a Jacob. Volviendo exhausto y hambriento del campo luego del día de caza, Esaú vende a Jacob los méritos que le corresponden como primogénito por un guiso de lentejas rojas.

En G-rar, en la tierra de los Filisteos, Isaac presenta a Rebeca como su hermana, por temor a ser asesinado por alguien que desee la belleza de Rebeca. Trabaja la tierra, destapa los pozos que su padre Avraham cavó y cava una serie de nuevos pozos de agua: sobre los dos primeros hay una lucha contra los Filisteos, pero las aguas del tercer pozo son disfrutadas con tranquilidad.

Esaú se casa con dos mujeres Cananeas. Isaac se pone anciano y ciego, y expresa su deseo de bendecir a Esaú antes de su muerte. Mientras Esaú sale a cazar para preparar la comida preferida de su padre, Rebeca (recordando que “el mayor servirá al menor) viste a Jacob con la ropa de Esaú, cubre sus brazos con piel de cabra para simular a su velludo hermano, prepara un plato similar y envía a Jacob hacia su padre. Jacob recibe la bendición de su padre para tener “el rocío del cielo y lo mejor de la tierra” y para gobernar a su hermano. Cuando Esaú vuelve y el engaño es revelado, todo lo que Isaac puede hacer por su hijo es predecir que vivirá por su espada y que, cuando Jacob descienda, Esaú subirá.

Jacob deja su casa partiendo hacia Padam-arám  para escaparse de la ira de Esaú y para encontrar una esposa en la familia del hermano de su madre, Labán. Esaú se casa con una tercera mujer, Majlat, la hija de Ismael. Pero es la intervención de Rebeca, quien por recordar la palabra dada a ella por el Eterno, permite que la bendición caiga sobre Jacob, el padre de la nación de Israel.

Esaú aborrecía a su hermano por haber hurtado su bendición. Esaú se une a dos mujeres cananeas y a una hija de Ismael, uniendo en uno dos pueblos con un común denominador: el odio al pueblo escogido de YHVH, dando origen al que hoy se conoce como el pueblo musulmán enemigo mortal del pueblo de Israel. El pueblo Edomita nace de tres mujeres; igualmente el pueblo escogido. Entender el conflicto entre Esaú y Jacob es clave para entender los tiempos proféticos que vivimos.

El pueblo que hoy conocemos como Palestina tiene sus raíces en Génesis. El fin de los tiempos estuvo establecido por YHVH desde el principio (Isaías 46: 9-10). Algunos maestros y comentaristas bíblicos señalan al pueblo musulmán como la bestia descrita en Apocalipsis 13:17-18/Deuteronomio 4:6. Algunos investigadores asocian al Islam con el Catolicismo, siendo ambos el pueblo Edomita enemigo de Israel.

Actualmente, Israel está bajo ataque terrorista protagonizado por el grupo islámico Hamas. Este nombre (Hamas) en hebreo significa violencia. La misma palabra utilizada para describir la “violencia” en la tierra antes del diluvio. Yeshua dijo “como en los días de Noé” así sería su retorno. La palabra del Eterno es cíclica. Bendito sea ÉL. Amén.

Lecturas Bíblicas: Génesis 25:19 al 28:9 │Malaquías 1:1 al 2:7 │Romanos 9:1-31 │Hebreos 11:20; 12:14